martes, 9 de junio de 2009

La guarida del dragón blanco

"Bienvenido a mi morada, entre por su propia voluntad y deje un poco de la felicidad que trae"

Eso decía Drácula en la novela, y eso estaba inscrito con letras doradas sobre un semicírculo de madera, pintado como si fuera piedra, y colocado sobre el frontal de esta puerta, como el ábside de un templo.
  La puerta en si misma es, junto con el dragón blanco, la protagonista de este particular espacio al que, Dracula y yo, os damos la bienvenida. Trabajada con moldes de arcilla y papel maché, dos gárgolas y el rostro de un duende se integran en esta puerta que primero fue decapada para luego aprovechar las texturas atrezándola como si fuera de piedra.  Su frontal, que da al salLista numerada
ón de tonos medievales, tiene como objetivo dobrecoger al visitante con un aire mágico. Ésta es la estrella de mis artes decorativas, muy laboriosa, pero con resultados bastante increíbles.



Nadie suele reparar en el lado trasero de las puertas, que se llenan de colgadores, bolsos y batas cuya estética deja bastante que desear. Yo prefiero guardar las cosas en los armarios. Cuando la puerta de la habitación está cerrada todo esto se ve, y la puerta de alguien joven, que aún vive con sus padres es, en suma, toda su casa. Por ello decidí decorar esta parte, generalmente desaprovechada, con la imagen de un ángel caído inscrito en un óvalo y algunas frases de los "textos apócrifos de Henok" sobre la Caída de los ángeles.



 Las setas sobre el estante azul, y el papel para fondo de belenes decorado con una luna no figuran en ninguna de las imágenes anteriores porque están casi escondidas, situadas sobre la cama a bastante altura, es un detalle que tiene como objetivo no dejar vacías las zonas altas, ya que los techos, demasiado alejados, producen una sensación de vacío que intimida a quien vive bajo ellos, ya que no estamos acostumbrados actualmente a usar techos tan altos.


Si nos vamos acercando a estas imágenes podemos darnos cuenta de que las esquinas y las vigas no sólo están decoradas con cenefas de motivos celtas. En una esquina, como una estilizada gárgola en lo alto de una columna, vigilando la entrada, un dragón custodia los sueños del durmiente. Es el protagonista de esta habitación escepcional, sin duda. Podemos enmarcarlo en su entorno en las imágenes de abajo, que se alejan prograsivamente de él




Aunque no parezca posible, éste es el otro lado de la habitación.  En la imagen podemos ver la mesilla de "Wilde", y un elemento nuevo: la colcha, confeccionada con un patchwork hecho especialmente para la ocasión con diferentes telas, azules y negras, estampadas con estrellas.

El armario es antiguo, de origen Art Noveau, y ha sido respetado en su totalidad. Sus espejos, los del fondo de la vitrina y el gran espejo que no se vé, pero que está junto al armario multiplican el espacio hasta el infinito, creando un maravilloso efecto estelar cuando, por la noche, la habitación se ilumina con velas.

La zapatera no fue transformada más que en su color básico: el rojo original se transformó en azul marino para que se integrase con el resto de la estancia: Incluso la superficie de mármol fue respetada. Los objetos que hay sobre ella, un cuenco de papel maché, una caja de madera ornamentada con piedras azules y otros objetos, así como las fotografías de amigos de la familia y sus marcos fueron cuidadosamente seleccionados por sus colores. A la derecha de la imagen se puede percibir parte del lado interior de la puerta, tambien decorado al óleo, e intuir una porción de la cenefa celta superior, decorada con triskels y que, en este caso concreto se fractura para que el cielo azul oscuro, con estrellas doradas, situado encima se derrame.


 

Si uno se acerca a esta vitrina y la mira con detenimiento, puede encontrarse con sus detalles. Haré una única observación a este detalle: Esculturas de ángeles, botellas rojas llenas de absenta, máscaras venecianas, flores de tela de tamaño desproporcionado, figuras de duendes, brujas, hadas, botellas de colonia rellenas de algas... ¿que tienen en común todos estos objetos? 
1) el estilo: figurativo, clásico, antiguo.
2) los colores: tonos frescos, azules, blancos, morados y rojos ennegrecidos.
3) lo que sugieren: magia, tiempos remotos, lugares imaginarios









Otro   reflejo en el espejo: En este caso al otro lado puede verse una vitrina que originalmente se remodeló para amueblar una tienda.
  En este caso, el mueble original, una vitrina  con espejo de fondo y materiales de escasa calidad, se decoró con papel de periódico teñido con anilinas color turquesa, y rematado con toques de pincel seco color dorado. El fin era reforzar el aspecto "kitch" del mueble convirtiéndolo en un objeto rococó donde el elemento disonante son los recortes de periódico que lo visten, cuyos textos aún pueden leerse bajo la superficie entintada.  
También en esta imagen se puede observar algo del trabajo de la puerta y los leones alados con velas plateadas a los lados del espejo, partes recicladas de una lámpara.



La habitación reflejada en el espejo. Desde aquí se pueden ver las cenefas celtas que decoran las vigas sobre un tono color crudo, la lámpara de forja artesana, y las paredes, pintadas en un turquesa algo agrisado y decorada con estrellas blancas. En el suelo una alfombrilla decorada con lunas y estrellas sobre fondo azul marino y al fondo de la imagen la mesilla con frases de Oscar Wilde. El enorme espejo que duplicaba los espacios de esta habitación pertenecía a un aparador y originalmente se veía tumbado, pero en esta ocasión lo colocamos de pie y o decoramos pegando sobre él piezas de bisutería sueltas adheridas con resina, de modo que el espejo quedara enjoyado

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